Elaborado en Jerez (Cádiz) con las variedades Palomino y Pedro Ximénez.
Sabia mezcla de sobretablas de Palomino y Pedro Ximénez para entrar en el sistema de criaderas y soleras para su crianza y envejecimiento del tipo físico–químico por oxidación en botas de roble. Vejez media mínima de seis años. Como resultado, este singular oloroso dulce, o “cream”, que llaman los británicos.